La sociedad de la información ha
exigido el desarrollo de habilidades y conocimientos frente al uso de las
diferentes herramientas tecnológicas aplicadas a la información y comunicación,
permitiendo el acceso a cualquier tipo de información a través de la web.
Los grandes adelantos
tecnológicos, van creciendo a pasos agigantados y la incursión en el mercado de
diferentes dispositivos móviles con acceso a internet, han permitido como lo
expresan Guilleumas
y Gil (2010), “incluir diferentes servicios que permiten comunicarse, buscar
información, generar datos y recursos, acceder a bases de datos, ejecutar
aplicaciones educativas y acceder a Internet”.
Estas herramientas tecnológicos ha
permeado las instancias educativas y el docente no puede ser ajeno a esto
proceso que exige pensar en la necesidad de integrar las TIC a los ambientes de
aprendizaje, ya que permiten acceder a todo tipo de información que contribuya
al aprendizaje, desarrollar espacios de trabajo colaborativo en red y
desarrollar habilidades de pensamiento a través del autoaprendizaje, como es el
caso de los modelos de aprendizaje bajo la modalidad learning, b-learning y m-Learning, la que según Cantillo y otros (2012), “se
basa fundamentalmente en el aprovechamiento de las tecnologías móviles como
base del proceso de aprendizaje. Por tanto, es un proceso de enseñanza y
aprendizaje que tiene lugar en distintos contextos (virtuales o físicos) y/o
haciendo uso de tecnologías móviles”.
Para que este tipo de aprendizaje
pueda darse de manera efectiva, Sadoval y otros (2012) en la revista EDUTEC
(Revista electrónica de tecnología educativa), hacen referencia a las competencias
que han de tener los docentes para que el aprendizaje móvil sea llevado acabo
de manera efectiva.
-“La primera competencia necesaria
para el aprendizaje móvil es saber utilizar el dispositivo”. Esto quiere decir
que depende del docente tomar conciencia de la necesidad que tiene el
permitirse reflexionar acerca de su papel como facilitador en el uso de estas
herramientas, saber cómo se usan, para qué se usan y como puede esto permitir
la adquisición de aprendizajes significativos.
-“Transversalizar las TIC en las
actividades dentro y fuera del salón de clases”. Lo cual solo se logra a través
de la práctica de estrategias pedagógicas flexibles y “apoyar su trabajo en tres
pilares fundamentales: contenido, tecnología y pedagogía”.
Otra competencia que no mencionan
los autores anteriores, tiene que ver con la capacidad del docente para generar
un cambio de paradigma en sí mismo y en sus estudiantes, entender que este tipo
de dispositivos hacen parte de la vida de las personas y que pueden ser a
provechados para el aprendizaje y que la autoridad del maestro prevalece en la
medida en que logre motivar a los estudiantes con unas directrices claras y
definidas al momento de usarlos dentro del aula de clase.
“El cambio de paradigma conlleva
también el fortalecimiento del aprender haciendo e intercambiando información
con otros: conocimiento compartido y socialmente distribuido”. Rabajoli
(2012).
Aunque existen diferentes paradigmas
psicológicos sobre los cuales podría sustentarse el trabajo con los
dispositivos móviles, el que podría acercarse a esta modalidad de aprendizaje
es la teoría psicosocial. Rabajoli (2012), propone para este caso la teoría de
Vigotsky desde el concepto de “andamiaje educativo”. Según esta autora “se
refiere al proceso de
controlar
los elementos de la tarea que están lejos de las capacidades del estudiante, de manera que pueda concentrarse en
dominar los que puede captar con rapidez”.
Este tipo
de experiencias pueden permitir el desarrollo de habilidades descontextualizadas,
siempre y cuando el docente permita una mediación adecuada en el uso de este
tipo de tecnologías y la práctica al interior del aula con las unidades de
análisis relacionadas con la palabra y el lenguaje, que para este caso se centraría
en el desarrollo de “habilidades para buscar y seleccionar la información
adecuada, capacidad de síntesis, de análisis y de comparación”. Rabajoli (2012).
Bibliografía.
Bibliografía.
Cantillo y otros. (2012). Tendencias actuales en el
uso de dispositivos móviles en educación, La educ@ción, n°147.
Recuperado de: http://educoas.org/portal/la_educacion_digital/147/pdf/ART_UNNED_EN.pdf
Guilleumas y Gil. (2010, Septiembre).
TIC y educación móviles en el aula de clase, presentado en: Congreso Iberoamericano de educación,
metas 2021. Buenos Aires, Argentina. Recuperado de: http://www.chubut.edu.ar/descargas/secundaria/congreso/TICEDUCACION/RLE2117Guile.pdf
Rabajoli. (2012). Recursos digitales para el aprendizaje: “una
estrategia para la innovación educativa en tiempos de cambio”. Webinar, IPPE – UNESCO – FLACSO, Montevideo-
Uruguay. Recuperado de: http://www.webinar.org.ar/sites/default/files/actividad/documentos/Graciela%20rabajoli%20Webinar2012.pdf
Sandoval y otros. (2012). Competencias tecnológicas y de
contenido necesarias para capacitar en la producción de recursos de aprendizaje
móvil, EDUTEC, Revista Electrónica de Tecnología Educativa, n° 39. Tecnológico de Monterrey.
Recuperado de: http://edutec.rediris.es/Revelec2/Revelec39/pdf/Edutec-e_39_Sandoval_Garcia_Ramirez.pdf
Muy interesante lo que planteas martha. Estoy de acuerdo con las competencias que planteas para el docente, e incluso para el estudiante; de tal forma que desarrollen habilidades y destrezas en su proceso de aprendizaje y en la transformación de su entorno.
ResponderEliminarTendré en cuenta estas referencias bibliográficas, que me parecen un excelente aporte.
Hola Donovan.
EliminarGracias por tus aportes.
Me alegra saber que mi trabajo te brinde herramientas para aprender y seguir creciendo, esa es la idea.